20 octubre 2009

ESPIRITUALIDAD viene de Espíritu, de Alma, de Ánimo.

Yo entendía el concepto de espiritualidad como que se refería a la religión únicamente y sus preceptos. También pensaba que la espiritualidad iba ligada al individuo de acuerdo a sus creencias religiosas y de ahí provenía, su forma de pensar en cuanto a lo que significa espiritualidad, su misticismo, sus propios cultos y que la grandeza de espíritu, estaba en su alma por sus buenas acciones ante su religión porque supongo que en todas las religiones tienen su forma de ayudarse y de manifestarse como seres humanos donde aportan un beneficio a su sociedad, aunque muchas difieren en cuanto a semejanza porque cada una tiene su propia idiosincrasia y todas son dignas de respeto.


Ahora bien, he comprendido que la espiritualidad se mide por las acciones de las personas más que por su religión.

Todos nosotros somos seres humanos pensantes y que valemos, no valemos por lo que tenemos sino por lo que somos y por lo que transmitimos a nuestros congéneres.

Hay quien logra destacar más que los demás y se vuelve un líder y hay quien se queda solo en el anonimato. Cada quien es lo que quiere ser. Cada quien tiene defectos y virtudes. Hay de todo en nuestro Universo.

En la vida debe existir una armonía, la espiritualidad forma parte de ello.

La espiritualidad es un compromiso con uno mismo para estar en paz, para dar un confort a quien lo necesite y para ayudar a las personas a que encuentren también su propia espiritualidad, a través del Amor, del amor a sus semejantes y a lo que les rodea y en realidad es hacer el bien, sin mirar a quién.

Es necesario estudiar, prepararse y desarrollarse en un mundo en el que podamos dar más, más de nosotros mismos.

Es quitarse todas las caretas que lo rigen a uno y demostrar que el sentido de lo espiritual se puede lograr a través del propio ser y no del tener.

Es muy fácil decir yo tengo éxito porque tengo todo lo que me he logrado forjar haciendo durante toda una vida; pero viene una enfermedad y arrasa con su vida y amenaza con una muerte y el tener se derrumba porque solo hay algo que no se puede comprar y eso es la Vida.

Es en ese momento cuando surge el ser y lo superficial se vuelve espiritual.

Todos tenemos ese sentido espiritual, solo que no lo sabemos desarrollar porque pensamos más en lo material y en el éxito.

Nos llenamos de cosas y más cosas y entre más tengamos nos sentimos contentos y compramos más cosas y así sucesivamente y al final, esas cosas a los que quedan no les dan la interpretación que le damos nosotros mismos; pero eso sí, somos felices porque tenemos cosas materiales, tangibles; pero lo importante, lo verdaderamente importante no lo encontramos y eso es porque no hurgamos en nuestro ser y no nos llenamos porque lo que nos falta es dar Amor y demostrarlo y rodearnos de Amor.

Ese es el verdadero sentido de la espiritualidad, desprenderse de todas sus ataduras y creer en uno mismo y demostrarse que puede ser feliz a pesar de las adversidades y aprender a dar Amor.

Fe, Esperanza y Caridad son tres cosas de las que no nos podemos despojar, de acuerdo a nuestros atavismos, lo demás sale sobrando.

La Fe…mueve montañas.

La Esperanza…es lo último que muere.

La Caridad…es lo que se debe practicar.

El Amor…es lo que nos rodea.

Lo espiritual conforma la Fe, la Esperanza, la Caridad y el Amor para saber cómo tratar al prójimo y como ser más humano con las personas que nos rodean y de cómo respetar su estilo de vida.

Si nosotros como personas: de aquí, de allá, de donde seamos; podemos alcanzar a profesar estos cuatro elementos necesarios para demostrar al mundo lo que significa querer dar a todos los seres humanos una ayuda espiritual, la podemos encontrar en nuestro ser y cada uno de nosotros las debemos rescatar.

Si no los tienes, bùscalos dentro de ti porque ahí están en tu interior, en tu ser y en tu propia espiritualidad.

No importa de qué religión, credo o circunstancia seas.

Lo importante eres tú y la ayuda que le brindes o proporciones a los demás, aunque tan solo sea un granito de arena en el desierto.

Esto tan solo es tu paso por la vida y la trascendencia que dejes como estigma de tu naturaleza como Ser Humano.

Es simplemente ser y estar, tú solo vive tu aquí y tu ahora y no te olvides de dar Amor a quien lo necesita con: una palabra, con un gesto, una caricia, un consuelo a sus oídos, un beso o un abrazo, esto es un Idioma Universal y por cada sonrisa que tú obtengas, vas a lograr esa paz espiritual que te confortará para lograr tu cometido y te dará esa fortaleza de espíritu en tu interior.

Para mí esta es la verdadera espiritualidad.

Tanat. Celina Merino